Puede darse de forma total o parcial, es decir, cuando se amortiza completamente el préstamo y se procede a la cancelación del mismo, o cuando se amortiza una parte del
importe. En ambos casos, deben tenerse en cuenta las condiciones del
contrato de préstamo. Las entidades crediticias cobran habitualmente
comisiones por cancelación anticipada del préstamo. En préstamos a tipo variable la comisión puede ser como máximo el 1% del total anticipado. En los préstamos a
interés fijo la comisión es normalmente más elevada.