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Acrónimo de “Purchasing Managers’ Index”, traducido al español como “Índice de Gestores de compra”. Es un indicador macroeconómico que refleja la situación económica de un país con respecto a varios sectores. Es común encontrar este índice referido a los sectores manufactureros, de servicios y, en menor medida, al de la construcción. Mide la fuerza de producción, nuevos pedidos, precios y ocupación de cada uno de estos sectores.

Este índice es elaborado por “Markit Economics” el cual, en España, cuenta con la colaboración de la Asociación Española de Profesionales de compras, Contratación y Aprovisionamientos (AERCE). El “pmi Manufacturero” refleja la situación económica del sector de la fabricación, sector que suele ser de los primeros en sentir recesiones económicas, aparte de suponer la cuarta parte del pib de la zona euro, por lo que a menudo se toma el índice como indicador temprano de un ciclo económico. Lo mismo ocurre con el “pmi de Servicios”.

Por esta razón, en los últimos años, este indicador está adquiriendo cada vez mayor fuerza e importancia entre los inversores. Los datos del pmi se publican mensualmente, y su informe es obtenido a través de encuestas que se realizan a los gestores de compras de las empresas privadas más importantes de cada sector. Resulta peculiar su metodología, ya que no se pregunta sobre datos concretos. La encuesta se basa en una serie de preguntas sobre cinco campos:

- Nuevos comandos o pedidos (30%)

- Producción (25%)

- Ocupación (20%)

- Término de entrega de proveedores (15%)

- Stock de compras (10%) Como podemos observar, cada campo viene ponderado según la importancia que se le presta a cada uno.

De esta manera, al gestor de compras se le pregunta si, por ejemplo, la producción ha sido menor, mayor o igual que el mes anterior. Dependiendo en el número resultante del índice, éste tendrá un significado u otro. Si el índice se encuentra por debajo de 42 anticipa una recesión de la economía en el país, por debajo de 50 indica contracción y, por el contrario, mayor de 50 indica expansión. Además, si el dato es superior al previsto también podría significar un dato positivo para la renta variable (por ejemplo, las acciones) y para el euro. En caso de ser inferior al previsto, la interpretación sería a la inversa; negativo para la renta variable y para el euro. En España, este índice se comenzó a efectuar en 1998 por la industria manufacturera, y en 1999 por el sector servicios.