Es el efecto positivo o negativo que generan las deudas de una empresa sobre la rentabilidad de sus inversiones para sus accionistas o propietarios, ROE (Return On Equity, en inglés).
Mientras los gastos financieros resultantes de la deuda afectan negativamente a los accionistas, es importante tener claro el efecto potencialmente positivo de las inversiones tanto en la rentabilidad económica de las inversiones o ROA (Return On Assets, en inglés).
La deuda puede afectar a la rentabilidad financiera, aumentándola o disminuyéndola. Esto depende de dos cosas:
Esto quiere decir que la
rentabilidad de los propietarios (ROE) es igual a la
rentabilidad de la
empresa (ROA) más el
factor del
apalancamiento. Cuando la ROE es superior a la ROA, el efecto producido es de un apalancamiento positivo. Esto sólo pasará cuando la ROA es superior al coste de la deuda “i”. Entonces si el coste de la deuda es superior a la ROA, el apalancamiento financiero es negativo.
Una empresa con mucha deuda está muy apalancada, sea positivo o negativo. No hay que confundir el apalancamiento financiero con la definición y uso del término en inglés en el mundo anglosajón donde se suele hablar de “
financial leverage” como una manera de aumentar la rentabilidad (o, en el caso negativo, aumentar la pérdida) después de haber invertido con
dinero prestado, o sea, usar el endeudamiento como una palanca.
Por ejemplo, la
compra de
acciones u otros activos con dinero prestado con la esperanza de que suban el
valor en el
futuro, para financiar la actividad en cuestión y también crear un beneficio. Esta es una práctica peligrosa porque si el valor de la acción cae, el efecto negativo de las pérdidas se multiplica por el factor de la caída y esto se acerca más a la especulación.
En inglés este concepto se denomina
financial leverage.