Tipo de contrato destinado a estudiantes en formación, o recién titulados, para que complementen, perfeccionen y practiquen lo aprendido.
Existen dos tipos de contratos formativos:
- Contrato para la formación y el aprendizaje. Este tipo especial de contrato tiene como finalidad la cualificación profesional retribuida, en alternancia con la actividad formativa.
- Contrato en prácticas. Contrato dirigido a personas que ya tuvieran un título universitario o de formación profesional de grado medio o superior, así como otros títulos oficiales reconocidos. Dentro de este grupo se incluyen también aquellos que hayan finalizado sus estudios en un periodo no superior a 5 años (7 en el caso de los discapacitados)