El cuadro eléctrico es un elemento de seguridad que existe en cualquier instalación eléctrica.
Existen dos tipos de cuadros eléctricos: los tradicionales y los de nueva construcción. Los primeros (tradicionales) están formados por tres componentes:
- El interruptor de control de potencia (ICP): lo que hace es intentar evitara daños en la instalación eléctrica en caso de sobrecargas, así como controlar que la potencia utilizada sea la adecuada.
- El interruptor diferencial (ID): de lo que se encarga es de desconectar la instalación eléctrica cuando hay una fuga a tierra de una manera rápida. Es una mecanismo muy útil ante la posibilidad de que una persona reciba calambres.
- Pequeños Interruptores Automáticos (PIAs): sirven para proteger de los incidentes que se producen por los cortocircuitos o sobrecargas en cada uno de los circuitos interiores: Iluminación, climatización, electrodomésticos...
En cuanto al caso de los cuadros de nueva construcción, éstos se componen de:
- Interruptor General Automático (IGA): protege la instalación contra cortocircuitos o sobrecargas, además de evitar que la potencia consumida exceda la máxima que admite la instalación.
- Protector Contra Sobretensiones (PCS): éste evita que los aparatos eléctricos puedan dañarse por sobretensiones.