La entidad que se encarga de garantizar el buen funcionamiento del sistema financiero y bancario de un país o grupo de países.
Entre sus funciones está el emitir la
moneda y controlar su circulación, supervisar a las instituciones financieras, regular la
deuda pública e implementar políticas para controlar la
inflación y el empleo.
El banco central posee una personalidad jurídica propia, es decir es independiente del gobierno de un país.
Los bancos centrales bien pueden ser una entidad gubernamental o, como en el caso de Estados Unidos, un entidad casi gubernamental. En Estados Unidos, el banco central es la
Reserva Federal (FED) y en la
Unión Europea el Banco Central Europeo (
BCE).
El origen de cada uno de los bancos centrales se debe a diferentes motivos. Así por ejemplo, y como anécdota curiosa, el primer banco central de Estados Unidos surgió como consecuencia de la guerra, y la razón era poder hacer frente a las
deudas que este acontecimiento bélico habían generado.
Para evitar problemas y favorecer la seguridad, el Tratado de Maastricht de 7 de febrero de 1992 configura a la figura del banco central con un margen de autonomía y acción amplio pero razonable.