Este contenido está disponible en los siguientes idiomas: Español | Inglés
Es el conjunto de instalaciones, maquinaria, instrumentos y activos financieros que se utilizan en la producción de bienes y servicios.
Según la Escuela Clásica, el capital es aquel valor orientado a la producción de mercancías para obtener plusvalía mediante la explotación de los trabajadores asalariados (resultado de las relaciones entre capitalistas y obreros). Según Karl Marx, en su libro “El Kapital” el concepto capital hace referencia al valor que se revaloriza y explica que el dinero en un proceso productivo es “algo” que permite que el dueño de los medios de producción pueda obtener una mayor cantidad de capital en futuras producciones. Según la Escuela Neoclásica, el capital o los bienes de capital son el conjunto de bienes duraderos producidos que se utilizan, a su vez, como factores productivos para producir más.
A día de hoy, existen distintos tipos de capital, entre los que se encuentran: Bienes de capital: son aquellos destinados a la producción de bienes de consumo. capital circulante: aquel que se agota en la producción y debe ser repuesto. capital fijo: aquel que no se agota pero tiene un desgaste a largo plazo. Algunos economistas también distinguen entre capitales materiales e inmateriales, estando los últimos basados en las facultades y condiciones personales del trabajador como pueden ser su educación, moralidad, cultura, etc.
Dos características importantes del capital son que su creación involucra un costo, porque es necesario utilizar recursos que podrían destinarse al consumo; y la aplicación del capital al proceso de producción incrementa la productividad de los otros factores productivos, tales como el trabajo y la tierra.
Estos aumentos de productividad son los beneficios que compensan los sacrificios de la creación de capital. El concepto capital tiene varias otras acepciones: