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Dependiendo del ámbito en que se cite puede equivaler simplemente a 1% (cambio de valor de una acción o bono), o a una centésima parte de 1% (cambio de valor de un contrato de futuros), o al 1% del total del préstamo hipotecario al momento de firmar el contrato. 

Se utiliza este término para describir un cambio en el valor de una acción, bono u otra obligación. En la mayoría de los casos la subida de “un punto” significa que el valor de la obligación ha incrementado por 1%. Un ejemplo para aclarar esto sería el siguiente:

Si el valor de un bono de 1.000 euros; aumenta en precio por 10 euros;, se puede decir que el bono ha subido 1 punto (10/1000 = 0,01 = 1% = 1 punto). Este sistema también sirve para los tipos de interés para préstamos o hipotecas. Sin embargo, cuando se habla de una acción común u ordinaria, los puntos se refieren a las unidades de la moneda en que está denominada la acción, lo que quiere decir 1 punto es igual a 1 euro (ej. si el precio de una acción de los EE.UU. ha subido $1,50, significa que la acción subió 1,5 puntos).

Por otra parte, con algunos futuros que fluctúan en céntimos, 1 punto, entonces, es igual a 1 céntimo (ej. si el valor de un futuro baja 50 puntos, esto significa que ha perdido 0,50€ de valor). Los puntos básicos son una centésima parte de un punto porcentual. Es decir, hay 100 puntos básicos por cada 1%.